Parecerá que tengo mucho afecto a las botellas, pero esta historia tambien hablará de una.
Sucede que desde hace tiempo, tengo en mi habitación una botella de cerveza sin abrir, cuando un día me puse a pensar, ¿De dónde salió?
Tomándolo con calma me puse a hacer memoria acerca del origen de esta botella, y por fin pude recordarlo, hasta pensé cómo pude haberlo olvidado, si esa noche iba a ser estupenda, todos los amigos ibamos a casa de Diego (uno de nosotros pero no tan cercano) jugaríamos risk y rematariamos con unos "tragos coquetos".
Ese día no todo salió muy bien, ya que en cuanto llegamos, una llamada causó la partida de la mitad de "la banda" dejando solo a 3 personas además de diego en dicho lugar. Eso no fué todo, tambien nos encontramos con que diego se nos había adelantado a los tragos coquetos y ya no estaba en el mejor de los estados.
Decidimos marcharnos, no sería lo mismo con estas circunstancias, y cuando estaba junto a la puerta escuché una voz diciendo "la última y nos vamos" y yo, bastante débil accedí a la propuesta, cuando concluyó esa última, tomé una para el camino aunque por azar del destino nunca fue abierta.
Tiempo después, recibo un llamado bastante triste, ¡Diego ha muerto!
Además de las fotos, me quedó la botella como un vivo recuerdo de él, hoy mi botella sigue conmigo, abierta por un descuido y quemada por el sol de las tardes, pero bueno, esto me enseña a mi y le enseña a usted que no todas las botellas son para lo que parecen, muchas vece, pudieran ser algo más.
Sucede que desde hace tiempo, tengo en mi habitación una botella de cerveza sin abrir, cuando un día me puse a pensar, ¿De dónde salió?
Tomándolo con calma me puse a hacer memoria acerca del origen de esta botella, y por fin pude recordarlo, hasta pensé cómo pude haberlo olvidado, si esa noche iba a ser estupenda, todos los amigos ibamos a casa de Diego (uno de nosotros pero no tan cercano) jugaríamos risk y rematariamos con unos "tragos coquetos".
Ese día no todo salió muy bien, ya que en cuanto llegamos, una llamada causó la partida de la mitad de "la banda" dejando solo a 3 personas además de diego en dicho lugar. Eso no fué todo, tambien nos encontramos con que diego se nos había adelantado a los tragos coquetos y ya no estaba en el mejor de los estados.
Decidimos marcharnos, no sería lo mismo con estas circunstancias, y cuando estaba junto a la puerta escuché una voz diciendo "la última y nos vamos" y yo, bastante débil accedí a la propuesta, cuando concluyó esa última, tomé una para el camino aunque por azar del destino nunca fue abierta.
Tiempo después, recibo un llamado bastante triste, ¡Diego ha muerto!
Además de las fotos, me quedó la botella como un vivo recuerdo de él, hoy mi botella sigue conmigo, abierta por un descuido y quemada por el sol de las tardes, pero bueno, esto me enseña a mi y le enseña a usted que no todas las botellas son para lo que parecen, muchas vece, pudieran ser algo más.
¡Hola Parolín!
ResponderEliminar¡Este blog es muy agradable! me alegra que incorpores otros contenidos diferentes a los de la clase. Después de todo, Taller de Redacción es pata aprender a redactar correctamente todo lo que quieras comunicar, lo que sea. Aquí ese objetivo se ha alcanzado.
No obstante, se detectan aún algunos errores en la redacción como el uso de mayúsculas y el uso correcto de las comas, entre otros. Por favor, checa lo que hemos visto hasta ahora en la clase para que tus próximos post sean igual de amenos pero mejor redactados. =)
Saludos,
Profra. Ve*